Si hay un buen lugar para conocer Alicante es el castillo de Santa Bárbara sobre el monte Benacantil, a 166 metros sobre el mar, el lugar escogido por íberos, romanos y musulmanes para disfrutar de las vistas de toda la bahía y protegerse de sus enemigos. A sus pies se encuentra un hotel tan estratégicamente situado como el castillo, pero no para defenderse sino todo lo contrario: comunicarse con interesantes opciones. Es el hotel Maya.
Fíjate, llegas caminando al casco antiguo de Alicante en 7 minutos y en 10 al centro de la ciudad por un paseo marítimo, aunque tienes parada de bus en el mismo hotel y a 2 minutos la del TRAM, que te lleva a las playas y a ciudades como Benidorm, Calpe, Altea… A 50 metros para el autobús del aeropuerto.
Es un bonito hotel de habitaciones espaciosas y vistas al mar o al castillo de Santa Bárbara, en su mayoría. Tiene un buen restaurante mediterráneo, una piscina exterior y otra infantil. Y en julio y agosto cuenta con animadores que divierten a los niños y les retan con gimcanas y juegos de pistas. Y tienen una oferta que te va a encantar: 1 niño gratis hasta 11 años en habitación familiar y un segundo hijo al 50 %, ¡menuda propuesta!
Pues bien, de martes a domingo y en verano, el castillo de Santa Bárbara organiza visitas teatralizadas que hagan sentir a mayores y pequeños lo que fue la vida en él y de qué sucesos históricos fue protagonista o testigo. Es un plan perfecto: una buena playa durante el día, tarde de teatro y noche de cena en la terraza de un buen hotel familiar. La magia del verano.