En Tierra de Alba, en Salamanca, se conoce una España antigua y novelesca que conserva los sabores de antaño que perdurarán siempre. En este término municipal hubo cuatro pueblos, Galinduste, Gutiérrez Velasco Álvarez, Andarromero y Martín Pérez, de los cuales los dos últimos están despoblados. ¿Has estado alguna vez en un pueblo así? Es una experiencia que activa la imaginación y trae a la mente libros y películas misteriosos que nos han gustado. Tierra de Alba os sonará además por Alba de Tormes…
Galinduste está sobre una pequeña elevación junto a un arroyo y aún conserva restos de su castillo, Bien de Interés Cultural desde 1949. Tiene atalaya, torre del reloj y cómo no, grullas. Y algo de lo que también habrás oído hablar: paseos a lo largo del río Tormes a través de la dehesa charra, donde verás toros de lidia.
En este lugar tan castellano no falta el hotel rural familiar, Casa rural El Caño, muy cuidada, con grandes espacios, perfecta para viajar con niños. Varias habitaciones amplias y luminosas con baños confortables en medio de una gran finca con zona de juegos. Y rodeada de granjas que se pueden visitar. Aquí se duerme en colchones Lo Natura sobre almohadas de viscolástica con áloe, bajo edredones de plumón de oca. Y 1 hijo menor de 2 años se aloja gratis.
Para mayor disfrute, a 15 minutos se encuentra Guijuelo, cuna del mejor jamón ibérico del mundo, en plena Ruta del Jamón. Un buen aliciente ¿verdad?